El estilo Oriental se basa en la decoración tradicional y más moderna del continente asiático, que engloba una gran cantidad de países son estilos muy singulares. El estilo oriental que empleamos en occidente engloba la decoración china, japonesa, india, o thai, entre otras. Por lo que antes de ponernos a elegir, es importante conocer las singularidades de cada cultura, que aunque tiene algunos elementos comunes, muchos son propios de país o tradición concreta.
Sea cual sea el estilo Oriental elegido para decorar tu hogar, conseguirás darle un aire exótico y relajante, propio de estas culturas asiáticas.
Empecemos por los colores base del lejano oriente. El estilo Oriental se basa en tonos neutros, como blancos, beiges o marrones claros. Estos se emplearán en paredes, muebles, alfombras, etc. Acompañándolos de otros colores como el negro o colores vivos como rojo, ocre o naranja en el mobiliario auxiliar u otros accesorios decorativos.
Y hablando de muebles, debemos tener muy claro cuáles necesitamos y cómo los estructuraremos. La decoración asiática apuesta por la armonía y el equilibrio frente al caos. Es un estilo que destaca por su simpleza, equipando las casas con solo lo necesario, lo que la acerca mucho a la decoración minimalista. El yin y el yang en tu hogar.
Si debemos elegir muebles, habitualmente se emplean muebles bajos para mantener el campo visual abierto, y en poca cantidad, en una clara apuesta por la armonía frente al caos. El estilo Oriental moderno destaca por su simplicidad, especialmente el estilo thai y japonés.
Los elementos textiles como cojines, alfombras o cortinas suelen incluir estampados geométricos, florares o de animales, pero siempre sin recargar en exceso.
El estilo Oriental traslada el yin y el yang asiático a tu hogar, creando estancias con la simplicidad y la elegancia como pilares.